VOLVIÓ LA CALMA. LO ÚLTIMO QUE HIZO ÉL ANTES DE DAR MEDIA VUELTA Y ALEJARSE, SIN CORRER, CAMINANDO DESPACIO COMO ÚLTIMO DESAFÍO, FUE ESCUPIR, OSTENTOSAMENTE, MUY CERCA DE LA CARA DEL CAÍDO. PERO NO LO HIZO POR DESPRECIO. FUE SÓLO UN GESTO INSTINTIVO. COMO SI TUVIERA LA BOCA LLENA DE MIERDA.

Detención

Cuando me dieron la noticia del terrible suceso;
Supuse que ya era tarde,
Para llegar temprano a la
Trágica
inminente conjunción.

Su pelo de serpientes se erizó
Como reacción al desgraciado
Destierro vivido.

Las seis bestias infernales se mancharon
Con sangre,
Sólo la sangre puede expiar el pecado.

Sus interminables tristes suspiros
No pasaron desapercibidos.

La rata maloliente mordió
El anhelable y amargo dulce
De la salvación;

te fuiste
Sin entender que había sucedido,

Y ellas ganaron
La detención eterna
En este Círculo del Infierno.

1 comentario:

Alter Ego dijo...

El olor a Azufre y el calor eterno no pueden ser tan malos, una estancia en el infierno bien vale vivirla (o morirla).
Nice.
Saludos.